
En esta Fiesta de alegría y de gran Misericordia, estoy feliz de que luego de un año y medio de pruebas en mi vida, Jesús Sacramentado me guardado en Su Corazón, no permitiendo que cayera mas sino rescatándome de las fauces del maligno. Aun siento caminar por un túnel obscuro pero ya no sola, sino siempre de la mano de Jesús.
Aunque he llorado muchas noches y a veces mis lágrimas no parecen terminar por un sueño destruido, he sentido a Jesús enjuagando mis lágrimas y animándome a ser fuerte.
He podido entender un poco mas el silencio de Jesús, el cual siempre me ha intrigado y del cual he aprendido que en el silencio se puede decir muchisimo mas.

Solo puedo decir que confiio en Jesús, ahora mas que nunca y que la Mano protectora de Dios ha estado conmigo, ahora mas que nunca y que me dejo mimar y consentir por El.
Gracias Jesús por dejar Tu Corazón Sacratísimo en el Sagrario donde siempre te podemos encontrar y donde solo Tu sabes consolar cuando estamos dispuestos a consolarte a Ti por lo ingratos que somos con Tu Amor.
Gracias por darme a Tu Madre Santísima, mi Madre y consejera y de quien aprendo a ser mejor y dejarme moldear por Ella para Ti.
Lo que has de enviarme, enseñame vivirlo con Amor y lo que falte de esta prueba Te la ofrezco, haz con ella lo que Tu creas mejor. Gracias por lo que permites en mi vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario